El senador republicano Randy Fine ha introducido un proyecto de ley que busca impedir que ciertas universidades públicas de Florida acepten a estudiantes sin autorización migratoria. Esta medida se enfoca en instituciones con tasas de admisión inferiores al 85%, entre las cuales se incluyen la Universidad de Florida (UF), Florida State University (FSU), la Universidad de Florida Central (UCF) y la Universidad Internacional de Florida (FIU).
Nueva ley en Florida busca restringir admisiones universitarias a indocumentados
Dicha restricción supone un cambio drástico en la política estatal, ya que en la actualidad, los jóvenes indocumentados gozan de la misma tasa de matrícula que los residentes legales. Alrededor de 6.500 estudiantes se benefician anualmente de la exención de matrícula fuera del estado, según el Florida Policy Institute.
Bajo la nueva propuesta, este grupo quedaría excluido de universidades con altos estándares de selección, generando inquietud en organizaciones que defienden a la comunidad migrante. TheDream.US, que provee becas a estudiantes sin estatus legal, señala que el proyecto podría resultar contraproducente en una coyuntura donde las matrículas universitarias van a la baja.
Respaldo del Gobernador y objetivos federales
El gobernador Ron DeSantis impulsa esta iniciativa como parte de su estrategia para alinear las políticas estatales con la agenda migratoria federal.
Según el mandatario, Florida debe eliminar todo incentivo que promueva la inmigración irregular y reforzar la colaboración con el gobierno de Washington. Asimismo, ha convocado a una sesión legislativa especial que comenzará poco después de la investidura presidencial, con el fin de acelerar la aprobación de medidas destinadas a endurecer los controles migratorios en la región.
Líderes republicanos del legislativo han calificado de “prematura” la solicitud de DeSantis, advirtiendo que se carece de un paquete integral de proyectos para debatir en la sesión extraordinaria. Por otra parte, el propio Fine, cercano a las ideas del gobernador, se mostró escéptico sobre la urgencia planteada, al considerar que el proceso debe seguir un curso más sosegado y fundamentado. Sin embargo, mantiene su convicción de que los cupos en universidades de alto nivel deben priorizar a estadounidenses y residentes legales.
Perspectivas para la comunidad inmigrante
Defensores de derechos civiles argumentan que la ley impactaría a personas que han pasado gran parte de sus vidas en Florida, impidiendo su avance académico y profesional.
Diversos estudios, como los del Pew Research Center, ubican a más de un millón de inmigrantes indocumentados en el estado, muchos de los cuales aportan activamente en distintos sectores de la economía. Pese a ello, los partidarios del proyecto subrayan que estas medidas protegen los intereses de los contribuyentes y garantizan mayor equidad para la población con estatus legal.
La legislación impulsada por el senador Fine refleja el giro de Florida hacia políticas migratorias más estrictas y abre un amplio debate sobre el acceso a la educación superior. También pone de relieve las discrepancias entre el poder ejecutivo y el legislativo en torno al calendario y contenido de las reformas propuestas.
Por ende, la sesión especial planteada por DeSantis será determinante para el futuro de miles de jóvenes indocumentados que aspiran a una formación universitaria de calidad. Mientras tanto, la opinión pública se mantiene dividida, a la espera de decisiones que podrían reformar profundamente el panorama académico y demográfico del estado.
Fuentes de autoridad consultadas:
(Nota informativa y sujeta a cambios legislativos. Para más detalles, consulte las páginas oficiales de las instituciones estatales y federales.)
Publicado el 16 de enero de 2025.
